Mara y yo.

-¿Dónde estás?,¿Por que desapareces cuando más te necesito?-
-Yo no desaparecí, me escondía en las sombras de tus lágrimas, que por cierto que amargas eran.
-Calla Mara que sabes por que son así.Mi querido Mara te extrañe tanto príncipe.
-Mi princesa no me he ido aquí estoy, mi niña.
-Acaríciame con tus fríos dedos, bésame con tus labios mentirosos que me llenan de felicidad.
No puedo mi amor sabes que si te yo te tocara te mataría. Eres lo más bello que tengo, eres el ser humano que amo. Me encantaria.

-Mara he tenido sueños extraños como pesadillas, ¿tienes algo que ver?
-No, esta vez yo no hice nada al respecto, tal vez sena tus demonios internos.
-Jajaja que gracioso eres Mara ¿demonios?, ¿yo? el único que tengo dentro de mi eres tú.
-Princesa del mar, ah...recuerdo cuando te encontré... te veías tan indefensa pero bellisima a la vez. Oh Dios me sigues gustando.

-Mara y cuando te vi no me pude enamorar de otro que no fueras tú.
Quiero estar contigo toda la vida.

-La vida mi niña es para algo tan pequeño, tan solo un segundo de mi tiempo es para ti media vida. Pero contigo es diferente y no sé por que sea así.

-Y la verdad no quiero saberlo, tu presencia me reconforta y a la vez me produce una sensación de miedo.

-Mi belleza, me tengo que ir, sueña conmigo que estaré ahí.
-Angel de mis penas vete ya que provocaras un incendio y no en mi corazón.