Mi pobre corazón estaba hecho pedazos y sin vida. Estaba tan trsite y sin vida. Frio como el hielo en la penumbra de la noche apocaliptica de abril. Sin sangre por fluir, no sé como pude vivir sin mi corazón, realemnte estaba sumida en una depresión impresionante llorando por un amor imposible, llorando metales pesados tanto de mis ojos como de mis labios. Diluida en la oscuridad de mi mundo grité en mi deseperación que no podia más
Tanto dolor no cabia ya, me corte las venas,desconecte arterias y me desangre, no pude con el enorme dolor que sentia.
Pedí a Dios un conzuelo, algo que dejara de hacerme sufrir,le pedí que enviara un hombre que me amara. Pedia tanto que ni supe en que momento deje de hablar pues mi saliva se habia estinguido. Miraba al cielo, pensando en el infinito y me dejaba morir, aun con la esperanza en mi alma.
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